Tarta de nata y turrón (o Charlota de Gijón)

Jamás había visto este postre ni sabía que era típico de Gijón hasta que lo vi en este blog. No estaba muy convencida de hacerlo, pero me dejé la ventana del navegador abierta justo en esa página cuando Mork se sentó delante del ordenador y le debieron de hacer chirivitas los ojos, porque me preguntó si podía hacerla… Hice el grandísimo esfuerzo (lo que hay que hacer por amor) 😉 jejeje.

Bien, os adelanto que no tiene ninguna complicación.

Ingredientes:

Almíbar:

  • 500 ml de agua
  • 100 g de azúcar
  • Una rama de canela o un poco de canela en polvo.

La tarta en sí:

  • Bizcochos de soletilla (yo utilicé un paquete entero, pero depende del tamaño del molde).
  • 300 ml de nata para montar
  • 6 cucharadas de azúcar
  • 4 hojas de gelatina neutra
  • 20 ml de leche muy caliente
  • 1 tableta de turrón de Jijona
  • Papel film para forrar el molde.

Cobertura de chocolate:

  • 50 ml de leche o 50 ml de nata
  • 100 g de chocolate fondant

Preparación:

Lo primero es preparar el almíbar, poniendo al fuego todos sus ingredientes y dejando hervir durante 5-7 minutos. Dejamos enfriar mientras hacemos el resto de la tarta.

Metemos las hojas de gelatina en agua para que se hidraten (10 minutos).

Trituramos el turrón y lo separamos en dos partes: cada una de ellas la ponemos entre 2 papeles film y con un rodillo las aplastamos y le damos forma redonda, más o menos del diámetro de nuestro molde., de tal manera que nos quedarán algo parecido a dos láminas de turrón. Reservamos.

Montamos la nata con el azúcar. Ya estará hidratada la gelatina, que disolvemos en la leche muy caliente. dejamos que temple y la añadimos poco a poco a la nata montada.

Forramos el molde de papel film y vamos cubriendo el fondo y los laterales del mismo con los bizcochos bañados en el almíbar. Añadimos 1/3 de la nata y ponemos encima una lámina de turrón. Añadimos otro tercio y otra lámina de turrón y finalmente terminamos con lo que nos queda de la nata.

Cubrimos todo con más bizcochos bañados en el almíbar, tapamos bien y dejamos enfriar.

Cuando esté frío, desmoldamos con cuidado y nos ponemos con la cobertura de choco: calentamos la leche o la nata con el chocolate, hasta que espese. Dejamos templar y lo echamos por encima de la tarta. Volvemos a enfirarlo todo, durante 2 – 3 horas.

Tiramisú

Esta receta os va a encantar porque es sencillísima y hay dos cosas que odio y que no lleva: licor y claras montadas a punto de nieve. ¿Que no os lo creéis? Vais a ver que es verdad.

Ingredientes:

  • medio litro de nata para montar
  • una tarrina de queso filadelfia
  • una tarrina de queso mascarpone
  • cuatro cucharadas de azúcar
  • un tazón de agua
  • una cucharada de café soluble
  • bizcochos de soletilla
  • cacao en polvo o colacao

Preparación:

Para la crema, primero hay que montar muy bien la nata con el azúcar hasta que quede muy espesa. Añadimos los quesos y batimos todo muy bien hasta que quede una crema uniforme.

Calentamos el agua y echamos una cucharada -o lo que guste, según se prefiera más o menos cargado- de café soluble (yo no le echo azúcar, porque la crema ya es suficientemente dulce). Ahora, para que sea más cómodo, voy echando un chorro de café en un plato y en él mojo los bizcochos, que se empapen bien, y los vamos colocando en el molde elegido para hacer la base de la tarta.

Una vez hecha la capa de bizcocho, por encima echamos una capa de crema. Luego otra de bizcochos mojados en café, otra de crema y así sucesivamente hasta que, al final, la última capa sea de crema. El número de capas dependerá del tamaño de cada molde; a mí me salen 3 (3 de bizcocho y 3 de nata) y mi molde es bastante grande.

Para terminar, echo una cucharadita de cacao en polvo en un colador y lo espolvoreo por encima de la tarta. También quedaría rico con birutas de chocolate o similar.

No hay nada más fácil que mis recetas 😀